Colombia
El presidente Gustavo Petro anunció el 15 de abril la declaración de emergencia sanitaria y económica a nivel nacional debido al brote de fiebre amarilla, enfermedad transmitida por el mosquito Aedes Aegypti, que ha cobrado la vida de varias personas, especialmente en el Tolima. En su mensaje, Petro destacó la gravedad de la situación y la expansión del virus a zonas fuera de su área tradicional de riesgo, como Bogotá.
El mandatario criticó la falta de respuesta de la gobernadora del Tolima, Adriana Magali Matiz, quien no habría destinado los recursos necesarios para enfrentar la crisis sanitaria. También expresó preocupación por la falta de equipos de respuesta en Bogotá, una de las ciudades más vulnerables debido a su alta densidad poblacional.
Petro defendió la necesidad de una intervención económica, señalando que los recursos recaudados de la medida fiscal serían destinados a mitigar los efectos del brote, entre otros desafíos. “Voy a decretar la emergencia económica por algo simple y contundente: LA VIDA”, afirmó el presidente, respondiendo a críticas de sectores empresariales que cuestionaban la medida.
El brote de fiebre amarilla, detectado inicialmente en la zona cafetera con la muerte de monos, ha generado alarma en todo el país. El presidente explicó que el calentamiento global ha permitido que el mosquito transmisor se desplace a nuevas zonas, incluidas las montañas y páramos, lo que aumenta el riesgo de transmisión en áreas urbanas.
Petro urgió a la población a vacunarse contra la fiebre amarilla, especialmente en las zonas más afectadas, como el Tolima, donde se han vacunado a 200,000 personas. Sin embargo, el mandatario enfatizó que aún queda mucho trabajo por hacer. Como parte de la respuesta, se implementará un plan de vacunación masiva en todo el país, alcanzando hasta las escuelas rurales.
A pesar de los esfuerzos del gobierno y la participación de alcaldes y hospitales, Petro también lamentó la falta de apoyo de algunos sectores productivos, como la Federación Nacional de Cafeteros, y pidió mayor cooperación en la lucha contra el virus.
Con el objetivo de reducir la mortalidad, el presidente instó a acelerar el proceso de vacunación y a mejorar la infraestructura hospitalaria para tratar a los enfermos. Con un llamado urgente a la ciudadanía, Petro concluyó su mensaje enfatizando la importancia de evitar la propagación del virus, especialmente durante la Semana Santa, e instó a las personas no vacunadas a abstenerse de viajar.