El gobierno de Gustavo Petro enfrenta la mayor crisis de su mandato con el Congreso. Sin si quiera haber cumplido el primer año de gobierno y cuando se suponía que debería estar gozando de las mieles de las mayorías, el Presidente sigue atrincherado en pugnas y rivalidades con el Legislativo que ya le comienzan a costar.
No solo se hundió el proyecto para regularizar el comercio del cannabis y tambalean sus reformas sociales, sino que naufragó la reforma laboral. En diálogo con medios, la representante Catherine Juvinao, de la Alianza Verde –partido que hace parte de la coalición de gobierno–, insta al diálogo y la concertación para recomponer las relaciones con el Congreso. Invita a Petro a bajar la cabeza y abandonar la soberbia, mientras le pide a los partidos poner de su parte.
Al cierre de sesiones se hundió no solo el proyecto de cannabis, sino también la reforma laboral. Sin duda, un duro golpe para el Gobierno, Juvinao le atribuye este resultado a una estrategia fallida, ''Este Gobierno, de manera miope y soberbia, fracturó las relaciones políticas con el Congreso por imponer sus puntos de honor, comenzando con la reforma a la salud, que es el detonante de todo lo que está pasando hoy. Esa estrategia es un error, porque el Presidente está atrincherado en que como él ganó las elecciones, básicamente el Congreso tiene que aprobar lo que dice. Pero cuando la mitad del país le vota en contra no se puede parar en esa posición. Hay que entender que, de alguna manera, debe conciliar con la otra mitad del país''.
El Gobierno se la jugó por el camino rudo, dijo ‘vamos a romper todo. Nos victimizamos y con eso construimos una narrativa según la cual somos los buenos y ellos los malos. Estamos con el pueblo y ellos con los corruptos y las élites’. Así no logramos nada. Se está sacrificando el objetivo de pasar las reformas por sostener una pelea y una narrativa de fractura hasta el final”.
Fuente: El Colombiano